Instituto Electoral del Estado de México

270310-1o

No halla faro la patria ensombrecida. No se mira luz por ninguna parte así rebusquen los promotores del optimismo ante el rancio nuevo discurso oficial alentado por la visita de los procónsules imperiales. No se logra por arte mágico ninguna solución especialmente cuando no hay magos para intentarlo.

Todos los días la sangre se nos viene encima, cada tarde llegan infalibles los negros pajarracos de las noticias fúnebres.

Quince acribillados aquí; veinte muertos en tal parte; ya se tiñen las calles de Mazatlán, de Culiacán o de Ciudad Juárez; ya llegan los sicarios con sus “cuernos de chivo”, ya cierran las avenidas y entronques carreteros en Monterrey, ya nos anuncian los decapitados de Guerrero, ya se encuentra uno los muertos sobre la carretera escénica de Acapulco; ya nos dicen de estudiantes asesinados en la acera del Instituto Tecnológico; partidos en dos por el estallido irremediable de una granada.

Ya aparecen ejecutados y en piezas los detenidos vivitos y coleando hace apenas unas horas cuando fueron vistos y grabados por las indiscretas cámaras de la televisión; por la lente de los fotógrafos de prensa.

–¿Quien mató al narco-vendedor?

–Fuenteovejuna, señor, gritan los policías y los marinos y los agentes y los oficiales y los ministeriales y los federales, pero nadie sabe nada y quienes sí saben se callan y de seguro ya emigraron de ahí.

Esta caliente la plaza, dicen en su jerga inmunda.,

Y las voces políticas nos repiten el mismo discurso. La violencia es pruebas de las pugnas de los grupos antes intocados e intocables; ahora se les han sacudido las ramas a los árboles de sus intereses y si se mira polvo por las ventanas se debe a la limpieza de la casa.

Estamos limpiando el país, estamos enfrentando a los malhechores, malosos, malandrines, malandros, malamadre, malillas, maloras, malevos, malos a secas o cualquiera otra palabra con tal significado. Esta es entonces la lucha entre el bien y el mal. “Vade retro”, faltó decir. Estamos en plena pelea, esta es la expresión de nuestro empeño, esta es la evidencia de nuestra justicia, esta es la obra indeclinable e insustituible.

Por eso el Presidente de la República ha dicho una vez más cómo va a seguir en este empeño al parecer interminable en este gobierno y en el siguiente al cual ya le dicta la agenda, en contra de quienes han pretendido usurpar actividades, territorios y potestades propias del gobierno y el Estado:

“…lo que hay que hacer es enfrentarlos.

“Y lo que hay que hacer, ahora que ellos están asumiendo que son una autoridad distinta, porque ellos cobran impuestos, no es cierto; ponen sus leyes, tienen fuerza pública, que son, por cierto, las definiciones del Estado: el monopolio de la autoridad, el monopolio de la ley, el monopolio de la fuerza pública y el monopolio de la recaudación.

“Ese desafío al Estado tiene que ser combatido con toda la fuerza del Estado. Y por esa razón hay que combatir a los criminales, porque aquí el único dueño de la ciudad o el único dueño del pueblo, o el único dueño de este Estado es el Estado mexicano, y las únicas leyes que valen son las leyes mexicanas y la única autoridad es la autoridad mexicana. Ninguna más, punto.

“Hay quienes suponen, hay quien dice, bueno es que hay que cambiar esta estrategia; fue un error combatir a los criminales.

“Y qué proponen.

“¿Que nos echemos para atrás?, ¿que los dejemos hacer lo que se les da la gana?

“¡Es totalmente absurdo, es ingenuo!”.

Y para no caer ni en el absurdo ni en lo ingenuo, México necesita, reconoce y acepta (de buena o mala gana, con entusiasmo febril o con simpleza servil) la ayuda de l Ejército de los Estados Unidos.

Además del concurso de nuestras fuerzas armadas (ya descalificadas por Jeanette Napolitano, jefa de la Seguridad Interior), es menester el auxilio internacional, pues solos no podemos, ¿ve usted?, como seguramente tampoco por nuestras solas capacidades nos es dable educar a nuestros profesionistas y por eso los mandamos a Harvard; o curar a nuestros enfermos y entonces los enviamos a Houston, ni divertir a nuestros niños si no es en Disneylandia. Es más no podemos ser felices si no vamos a Las Vegas, ¿ves?

Suerte la nuestra.

Para recibir al secretario de la Defensa de los Estados Unidos, el general Robert Gates, no necesitamos vivir en Irak ni en Afganistán. Con nosotros los invasores planetarios son educados y corteses.

–Pero pásele “misteryeneral”, pásele a lo barrido, aquí tiene usted su pobre casa. Y usted; señor Mullen, ¿no se quisiera llevar esta cajita de Olinalá para adornar sus oficinas en el Estado Mayor Conjunto? Mire. Vea, se le vería bien bonita en aquella esquinita de allá, junto a la ventana, ¿verdad?

–Y para usted, señora Napolitano, ni se vaya a creer; no estamos ofendidos por sus juicios sobre la inutilidad de nuestro ejército en Juárez, si ya sabemos cómo son estas cosas de los prontos, ¿verdad?, debe ser algo propio de sus sangre italiana, ¿no?, si a fin de cuentas todos somos latinos, cómo no.

Bueno, pues mire, para usted tenemos un rebocito muy lindo, es de Santa María y hasta lo puede correr por una sortija. Buena seda, señora, como muestra de nuestro interés en el entendimiento mutuo. Nosotros sí sabemos ser agradecidos, mire nada más cuánta molestia se han tomado, venir desde allá como si no tuvieran otro quehacer; no si de verdad no sabemos como pagarles tanta buena voluntad.

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Pero en el lenguaje diplomático, el único al alcance de los oídos públicos, ese en cuyas crípticas oraciones se esconden los arreglos profundos de cuya existencia nos venimos a enterar cuando han pasado los años, la visita de la más poderosa delegación militar llegada a México desde la Segunda Guerra Mundial, cae en el marco de la “Iniciativa Mérida”, fórmula para nombrar un estado de colaboración forzosa impuesto por un gobierno extranjero y al cual México se adapta en la modalidad de una iniciativa común.

–¿Cuál es su formulación?

Veámoslo en las propias palabras de los estadunidenses.

“La Iniciativa Mérida es un programa histórico de cooperación que reconoce las responsabilidades compartidas de los Estados Unidos y México de luchar contra la violencia generada por la droga que amenaza a los ciudadanos de ambos países.

“El Congreso de los Estados Unidos, ha aprobado financiamiento para la iniciativa con amplio apoyo de ambos partidos; hasta la fecha más de 1,300 millones de dólares se han destinado (pero no entregado) a México.

“En la actualidad, la Iniciativa Mérida (en su primera fase) proporciona habilidades técnicas y asistencia a México para la profesionalización de la policía, la reforma judicial y penitenciaria, el reforzamiento de las tecnologías de información, el desarrollo de infraestructura, la seguridad fronteriza y el fomento de una cultura de legalidad”.

Antes de proseguir con el documento americano, vale la pena señalar el asunto de la “asistencia a México” en materia de “reforma judicial y penitenciaria”.

¿¿Creerán éstos en la inseguridad las cárceles mexicanas, no sólo como centro de motives frecuentes; control de los propios internos y fugas masivas? Eso es imposible. Nomás vean la eficacia del penal de Matamoros.

Sigo:

“Proyectos en el marco de la Iniciativa Mérida que están en marcha:

“Para asegurar que se refleje una visión compartida de seguridad, funcionarios de los Estados Unidos y México han colaborado a diversos niveles en reuniones de trabajo periódicas del Grupo Bilateral de Instrumentación. En 2010, encargados de planeación de políticas de ambos países se sentarán lado a lado en una nueva oficina bilateral, aumentando aún más el nivel de cooperación.

“Se ha capacitado a más de 4,300 nuevos investigadores en la academia de la Policía Federal en San Luis Potosí. Los cursos han sido impartidos por profesionales policiacos de Estados Unidos, Colombia, España, Canadá y la República Checa. El programa incluye técnicas de investigación criminal, recolección de evidencia, preservación de la escena del crimen, y ética.

“Para apoyar los esfuerzos de México contra el contrabando de dinero y armas, se está brindando equipo de inspección no invasiva a varias agencias. En 2009, SEDENA recibió 30 detectores manuales de iones y la SSP recibió 5 camionetas de rayos X Backscatter; así como 10 minivans de rayos X.

“Los Estados Unidos están aportando equipo y financiamiento para la reforma penitenciaria en México. Se están capacitando a instructores penitenciarios en Estados Unidos, y los custodios asisten a la nueva Academia Nacional de Administración Penitenciaria en México para tomar cursos recién diseñados.

“La Iniciativa Mérida está ayudando a oficiales policiacos y aduaneros a ampliar y mejorar los equipos caninos utilizados en la intercepción de narcóticos, armas de fuego, municiones, explosivos y demás contrabando. Se han capacitado más de doce equipos caninos, y la construcción de nuevas academias de formación canina para SSP (hasta perros bilingües vamos a tener bajo las órdenes de García Luna. A ver si no lo muerden) y Aduanas comenzará en 2010.

“Cinco helicópteros Bell 412 se entregaron a SEDENA en diciembre. En 2010, se entregará una aeronave CASA 235 a SEMAR y 3 helicópteros Blackhawk UH-60 a la SSP. Continuarán más entregas.”

Otras de las formas como los estadunidenses nos ayudan es mediante la declaración de “Narcotraficantes Especialmente Designados” de los peores “malandros” mexicanos. Ellos les llaman “cabecillas” extranjeros.

Esto de los designados no es como con los conductores de las fiestas de adolescentes y la selección de un sobrio para manejar el coche de todos los demás; no. Esto quiere decir: todos los bienes de un designado pueden ser incautados por la justicia americana.

El 24 de marzo se difundió esta información por medio del USIS (United States Information Service) :

“La Oficina de Control de Bienes de Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro designó el día de hoy a 54 miembros de cárteles de la droga como Narcotraficantes Especialmente Designados conforme la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros (Kingpin Act).

“En continuidad con las reuniones del Grupo Consultivo de Alto Nivel de la Iniciativa Mérida entre México y Estados Unidos llevadas a cabo en la Ciudad de México este martes, OFAC enfocó sus acciones contra 54 lugartenientes y líderes de las organizaciones mexicanas del cártel del Golfo y de los Zetas, responsables por gran parte de la violencia en México”.

–¿Es esto una real novedad? No.

El 25 de febrero de este año, mucho antes de la sesión del Grupo de Alto Nivel, la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro designó a siete elementos clave de la organización internacional de narcotráfico conocida como La Familia Michoacana (La Familia) como Narcotraficantes Especialmente Designados (SDNTs—Specially Designated Narcotics Traffickers).

“La acción de hoy tiene como objetivo señalar a dos individuos como líderes principales de “La Familia”, Nazario Moreno González (“El Chayo”) y José de Jesús Méndez Vargas (“El Chango”), junto con cinco de sus lugartenientes”.

Como se sabe la OFAC designó a la Familia Michoacana en abril del año pasado en tal condición, por órdenes del presidente Obama, quien advirtió: “la “Familia Michoacana” es uno de los cárteles de la droga mexicanos más nuevos y violentos. Continuaremos persiguiendo agresivamente a esta peligrosa organización y negando a sus líderes, empresas y operativos acceso al sistema financiero de los Estados Unidos.”

“”La Familia”, señalada en abril 2009 por el Presidente Obama como una organización narcotraficante extranjera importante -dice el Departamento del Tesoro–, es una agrupación extremadamente violenta que tiene operaciones principalmente en el estado de Michoacán.

“Es una organización dividida en secciones, fuertemente involucrada en el narcotráfico, secuestro, extorsión, y otras actividades criminales. La Familia es conocida por su violencia brutal, que incluye ejecuciones con el tiro de gracia y decapitaciones. La acción de hoy es la primera acción derivada de la designación del Presidente”.

Esa designación permite, como en casi todos los casos, llevarse a los narcotraficantes (cuando los capturen) a Estados Unidos. México no puede ni siquiera meterlos presos como acabamos de comprobar.

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Hace muchos años el Colegio Nacional de Economistas era una presencia significativa en la vida pública mexicana. Estaban de moda los discípulos de Keynes, Adam Smith, Marx y otras cosas. La hegemonía de los economistas de izquierda, los discípulos de Ifigenia Martínez, Horacio Flores de la Peña, Edmundo Flores y otros así, se vino abajo con la irrupción de Carlos Salinas de Gortari y sus amigos.

Desde entonces los economistas de aquella rama se han apagado como gremio poderoso y le han dejado su lugar a los Gurría, los Levy, los Carstens, Werner y demás.

Pero a veces producen documentos interesantes como éste de su pasada reunión (18-20 de marzo) en Querétaro:

“…Se ofrecieron explicaciones sobre el estancamiento económico del último cuarto de siglo, que amenaza convertirse en permanente, y se concluyó que la actual política económica es incapaz de aumentar el crecimiento económico, la generación de empleos, los ingresos necesarios de la sociedad, y se corre el riesgo casi inminente de un colapso sistémico en el próximo futuro.

“Muchos participantes señalaron que la causa profunda del fracaso económico de México es el abandono del mandato constitucional en las políticas económicas para cumplir con el actual paradigma económico.

“El paradigma seguido por el país es diferente al que aplican las potencias económicas del mundo. De hecho, somos el último país donde se aplica éste. Somos el último samurai del neoliberalismo”.

Esta frase es una maravilla. Podría haber sido firmada por Jesús Puente Leyva o Armando Labra. Quizá sea obra de Rodolfo Becerril. Quien lo sabe, pero es de una profundidad casi poética.

O sea, no es un problema de política económica equivocada sino una errónea política de Estado.

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Pocas veces se ha visto una embestida adversa a una decisión de transporte público como el masivo rechazo al transporte escolar propuesto por Marcelo Ebrard (e impuesto como una medida disfrazada de ecología cuando no es sino un negocio). Se atascan los correos electrónicos con mensajes como éste:

“El gobierno de la Ciudad de México está a punto de convertir en ley el Programa de Transporte Escolar Obligatorio. El asunto afectaría a cientos de miles de familias en el Distrito Federal y me parece que su obligación profesional (del periodista) es analizarlo a profundidad.

¿Por qué no envían reporteros a estudiar lo que pasa en escuelas como el Colegio Madrid y el Instituto Inglés Mexicano, donde el Programa que en teoría funciona, resulta una completa simulación? ¿Por qué no recaban el punto de vista de los padres de familia sobre la medida? ¿O qué sólo los temas de narcotráfico y de la macroeconomía son importantes para ustedes?

Le pedimos de manera especial ponga atención a este tema, realmente nos compete a muchos mexicanos y la situación económica del país está muy difícil como para permitir estas ¡BARBARIDADES! ATTE. Pamela Benítez. Miembro de la Mesa directiva del Instituto Anglo Español, A.C.”

Este indignado mensaje de la señora Benítez es apenas uno de los cientos recibidos por este redactor en los últimos días.

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La fractura del PRD en Zacatecas y el mugrero caciquil de la señora Amalia García ya comienzan a dar frutos: Miguel Alejandro Alonso Reyes (27.2%), del PRI encabeza las encuestas. Cuauhtémoc Calderón Galván, del PAN (19.1%) lo sigue en segundo sitio. En tercero viene David Monreal, del PT (18.7%) y a la cola, arrastrando la cobija, el otrora poderoso PRD con Antonio Mejía (12.2%)

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

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