Instituto Electoral del Estado de México

Para el Gobierno somos invisibles y, a pesar de que la autoridad lo sabe, calla porque no conviene a sus intereses, denuncian indígenas mayas tzotziles que denuncian que López Obrador ya se va y no cumplió ayudar en el campo ni protegerlos del crimen organizado

Indígenas mayas tzotziles se manifestaron este 20 de abril para clamar por ayuda ante el abandono del populista Andrés Manuel López Obrador quien prometió ayudar para que hubiera mejoras en el campo y esto no ha sucedido, además de que los dejó a merced de grupos del crimen organizado, que además de amenazarlos los ha expulsado de sus tierras, toda vez que Chiapas se ha convertido en tierra sin ley y donde el narco es quien manda.

Lis indignados indígenas subrayaron en su reclamo que el gobierno de la 4T les mintió, no hubo nunca la ayuda prometida ni para las familias pobres ni para el campo, de la seguridad ni se diga, no existe más ley que la de los carteles de la droga que se disputan el estado.

«Queremos el cierre de las cantinas, puntos clandestinos donde presuntamente venden drogas. Exigimos ley seca en todo el municipio (Chalchiuitán), basta de tantas cantinas, basta de la venta de drogas», señaló Pedro Velazco, vocero del colectivo Pueblo Creyente, durante su reclamo.

Los pobladores de Chalchiuitán pertenecen a uno de los municipios más pobres de Chiapas, donde denuncian el olvido del campo por parte del gobierno de López Obrador que no se ha acercado a ellos, además que denuncian la presencia de grupos paramilitares y la baja escolaridad entre los jóvenes, quienes prefieren migrar a estados del norte del país o a Estados Unidos o Canadá, ya que no encuentran oportunidad de progreso en Chiapas.

Los manifestantes acusan omisión de las autoridades, por lo que clamaron por ayuda, luego de que casi al término del gobierno del populista Andrés Manuel López Obrador, todo quedó en politiquería, en palabras y sin que aparecieran los hechos.

Entre sus demandas piden clausurar las cantinas que son fachada para la venta de drogas, atención a los desplazados por la violencia y justicia para los activistas indígenas asesinados.

Rufina Pérez, defensora de los derechos de las mujeres desplazadas, relató a EFE la «agonía» que viven ante la inacción de las autoridades de Chalchiuitán y del estado que encabeza Rutilio Escandón.

«Con hijos y como mujer, es muy difícil. Para el Gobierno, somos invisibles y, a pesar de que la autoridad lo sabe, calla porque no conviene a sus intereses. El dolor y la incertidumbre es mayor, pues aún estamos en áreas de tierra infértil y sin los servicios básicos y sin justicia”, expuso.

La manifestación coincidió con el primer día de la gira por Chiapas de la candidata presidencial de la 4T, Claudia Sheinbaum, quien visitó los municipios de Tila, Chilón y Las Margaritas, donde ofreció apoyo a los indígenas contra la inseguridad del crimen oprganizado.

El contingente estuvo conformado por indígenas mayas tzotziles, en su mayoría mujeres, niños y adultos mayores, quienes se congregaron a las afueras del poblado de Chalchiuitán.

Los manifestantes portaban letreros con leyendas como «¡Que viva la paz!», «Las mujeres y hombres de Chalchihuitán queremos vivir dignamente», y «Alto a la violencia partidista».

La protesta ocurrió en medio de un alza de la violencia en los municipios de Pantelhó, Chenalhó, San Cristóbal de Las Casas, Tuxtla Gutiérrez (capital de Chiapas), Ocozocoautla, Berriozábal, Las Margaritas y Frontera Comalapa, en el límite sur de México.

Ante la presencia del crimen organizado, los indígenas denunciaron el despojo de sus tierras, amenazas de muerte, desplazamiento forzado y asesinatos.